¿Cómo cocinar de forma segura los insectos comestibles?
Cocinar insectos comestibles en casa es una forma interesante de explorar la entomofagia y los diferentes sabores y texturas que nos ofrecen los bichos. Sin embargo, comer insectos puede ser un peligro si no se toman las precauciones adecuadas. Al igual que sucede con otros alimentos, un error en la cadena de producción puede causar un producto deficiente que provoque enfermedades y malestar entre sus consumidores. Seguir estos consejos básicos nos ahorrará una mala experiencia en el médico o sentados en el baño las 24 horas:
Compra insectos comestibles de un proveedor de confianza
Los insectos comestibles pueden ser criados de forma no saludable, como pasa con el resto de comida ya sea carne, hortalizas, frutas, cereales o legumbres. Cultivos y cría con pesticidas, insecticidas y otros químicos que pueden dejar residuos en el alimento y perjudicar nuestra salud en el largo plazo. Cuando compres insectos para comer, ya sea en Internet de forma Online o en una tienda especializada física, será importante que te informes de la procedencia y de que el producto cumpla todas las leyes y normativas relativas a los insectos comestibles para que tenga todos los certificados de seguridad y calidad.
Usa solo insectos frescos y limpios.
Usar la vista y el sentido común también será clave para evitar una mala experiencia comiendo insectos. Si ves los insectos sucios de tierra u otra sustancia será necesario enjuagarlos con agua y secarlos con una toallita de papel. Con este proceso no perderán sabor o textura y eliminaremos sustancias tóxicas que puedan perjudicar nuestro organismo. Por supuesto, si a simple vista los insectos se ven podridos o no son frescos, ni lo pienses, tíralos a la basura y vuelve al paso anterior, comprarlos en un sitio de confianza.
Cuidado con los insectos vivos
Es importante matar los insectos antes de comerlos y para ello puedes hacerlo colocándolos en el congelador durante 24 horas o sumergiéndolos en agua hirviendo durante unos minutos. Con esta técnica habremos destruido muchas bacterias y parásitos en los insectos pero también evitaremos mordiscos en la boca y lengua. En la industria y cría de insectos comestibles se suelen matar en agua caliente para desinfectar todo bien y luego se congelan o se desecan para su comercialización a los clientes finales.
Lava tus manos y utensilios de cocina
La contaminación cruzada en la cocina existe y es peligrosa para nuestra salud por eso es importante lavarse las manos y los utensilios antes de manipular los insectos comestibles. Parece un consejo obvio que ya se debería saber por ser igual con el resto de alimentos pero nunca está de más recordarlo a los lectores.
Cocina los insectos a una temperatura superior a 75 °C
La mayor parte de bacterias y virus no sobrevive temperaturas superiores a los 75 °C si esta se mantiene durante unos segundos. Para evitar enfermedades transmitidas por los alimentos e insectos comestibles, lo ideal es cocinarlos a una temperatura mínima de 75 grados Celsius durante unos 2 minutos. La mayoría de recetas con insectos ya incluyen cocciones parecidas pero como mínimo se deberá alcanzar esta temperatura para estar seguros. Puedes cocinar los insectos de diferentes maneras, como saltearlos en una sartén con aceite, hervirlos en agua, hornearlos en el horno o asarlos a la parrilla.
Cuidado con las alergias
Recuerda que algunos insectos pueden causar alergias en ciertas personas delicadas a las proteínas animales. Es importante comer poco a poco para asegurarse de que no haya reacciones adversas antes de consumirlos en grandes cantidades. Si eres alérgico a los mariscos o moluscos, deberás tener especial cuidado, es posible que también seas alérgico a los insectos comestibles ya que contienen proteínas similares.
Busca información y recetas tradicionales
La información es oro y puede incluso salvar vidas. Comer insectos no es algo nuevo, está documentado en cientos de recetas, estudios científicos y experiencias. En caso de no estar seguro de cómo cocinar los insectos comestibles de manera segura, recomendamos buscar recetas confiables en Internet o en libros de cocina especializados.
Cuidado con la recolección por libre
Es posible recolectar insectos comestibles directamente de la naturaleza pero tiene sus riesgos. Será importante aprender y respetar las leyes locales así como no recolectar más de lo que necesitas para mantener una práctica sostenible. Recuerda que hay ciertos insectos que no se pueden comer por su naturaleza venenosa o tóxica. Pero lo más importante para hacerlo de forma segura para la salud es no recolectando tampoco cerca de áreas contaminadas o que puedan estar infectados con enfermedades.
Quita las entrañas, patas y las alas
Hay muchos insectos comestibles que tienen patas y alas en su fisonomía. Estas partes del cuerpo se recomiendan eliminar antes de cocinar debido a que son muy duras y difíciles de comer. Tanto es así que no es raro que se queden entre los dientes con cierta frecuencia. También se recomienda, en algunas especies de insectos, eliminar las entrañas ya que pueden ser portadoras de enfermedades y bacterias.